Los trastornos alimentarios, como la anorexia y la bulimia, han aumentado en un 300% en los últimos cinco años en el Perú. Reconocidos especialistas analizaron en el Foro UNIR la relación entre la salud mental, lo que comemos y las redes sociales.
La Universidad Internacional de La Rioja celebró el pasado 6 de noviembre su último Foro UNIR. En este caso, la institución académica reunió a destacadas expertas para analizar y debatir la relación entre la salud mental y los hábitos alimentarios en Perú.
El evento contó con la participación de María Victoria Arévalo, psicóloga clínica y directora del Instituto Peruano de Especialización en Terapia Cognitivo-Conductual (IPT); Carolina Arispe, psicoterapeuta cognitivo-conductual y especialista en Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA); María Paula Costa, psicoterapeuta cognitivo-conductual; y Soledad Misa, psicoterapeuta sistémico familiar y especialista en mindfulness, eating and compassion.
Las ponentes compartieron sus conocimientos y perspectivas sobre cómo la nutrición tiene una relación directa con cuestiones fundamentales como la salud mental o las relaciones familiares y afectivas.
La importancia de la educación nutricional
Arévalo destacó que 3 de cada 10 personas en el Perú sufren algún tipo de trastorno mental, y que el 80% de la población no recibe la atención adecuada. Además, los trastornos alimentarios, como la anorexia y la bulimia, han aumentado en un 300% en los últimos cinco años.
La directora del IPT subrayó la importancia de la educación nutricional desde la niñez para prevenir estos problemas, así como la necesidad de abordar los factores socioculturales que influyen en la percepción del cuerpo y la alimentación.
Por su parte, Arispe enfatizó que la familia y el entorno juegan un papel crucial en el desarrollo de hábitos alimentarios saludables. La psicoterapeuta explicó que los padres deben ser modelos a seguir y proporcionar un ambiente que fomente la alimentación saludable y el autocontrol.
Además, destacó que etiquetar los alimentos como “buenos” o “malos” puede generar una relación funesta con la comida, por lo que es importante enseñar a los niños a disfrutar de una dieta equilibrada sin restricciones extremas.
Principales puntos de debate
A lo largo del evento, las especialistas debatieron sobre múltiples cuestiones de actualidad que ilustran cómo la salud mental y los hábitos alimentarios están interrelacionados:
- Impacto de las redes sociales: Las redes sociales juegan un papel significativo en la percepción del cuerpo y los hábitos alimentarios de los jóvenes. La exposición constante a imágenes idealizadas puede generar insatisfacción corporal y contribuir al desarrollo de trastornos alimenticios.
- Comorbilidad con otros trastornos: Los trastornos alimentarios a menudo coexisten con otros problemas de salud mental, como la depresión, la ansiedad y los trastornos de personalidad. Esta comorbilidad complica el diagnóstico y tratamiento, requiriendo un enfoque multidisciplinario.
- Rol de la terapia cognitivo-conductual: La terapia cognitivo-conductual (TCC) es una herramienta eficaz en el tratamiento de los trastornos alimentarios. Esta terapia ayuda a los pacientes a identificar y modificar patrones de pensamiento y comportamiento disfuncionales, promoviendo una relación más saludable con la comida y el cuerpo.
- Relación entre salud mental y alimentación: La salud mental y los hábitos alimentarios están estrechamente relacionados. Estos trastornos pueden ser tanto una causa como una consecuencia de problemas de salud mental, como la depresión y la ansiedad.
- Importancia del autocontrol: El autocontrol es esencial para mantener unos hábitos saludables. Enseñar a los niños a controlar sus impulsos y a tomar decisiones informadas sobre su alimentación puede prevenirlos y mejorar su bienestar general.
Formar para ayudar
El Foro UNIR demostró que la relación entre la salud mental y la comida es compleja y multifacética. La colaboración entre expertos y la educación continua son esenciales para abordar estos desafíos y mejorar la calidad de vida de las personas.
La Universidad Internacional de La Rioja sigue comprometida con la formación de profesionales capaces de liderar la transformación en el ámbito de la salud mental y la alimentación, asegurando que los avances en investigación y práctica se traduzcan en beneficios reales para la sociedad.
Dentro del amplio catálogo académico de la Facultad de Ciencias de la Salud de UNIR, los interesados en esta práctica sanitaria pueden formarse en el Máster Universitario en Trastornos de la Conducta Alimentaria. Una titulación que permite a sus egresados trabajar de manera interdisciplinaria con otros profesionales de la salud, así como dar apoyo a familias y pacientes.