La mente y el comportamiento humano son tan complejos que no pueden estudiarse desde una sola perspectiva. Es por ello que, desde finales del siglo XIX, surgieron las denominadas escuelas psicológicas, que defienden y representan diversas teorías en torno a la ciencia psicológica.
Décadas atrás, los profesionales en este campo solían defender una corriente de pensamiento única. Esa tendencia ha cambiado, pues las escuelas psicológicas contemporáneas tienen una perspectiva más ecléctica, por lo que sus procedimientos e investigaciones incorporan múltiples sistemas teóricos.
Conocer las principales corrientes de la psicología es fundamental al momento de abordar una investigación en ese campo. Por ello, es un área presente en diversos estudios de postgrado, incluyendo la Maestría en Investigación Psicológica o la Maestría en Psicología Infantil de UNIR.
¿Qué son las escuelas psicológicas?
Las escuelas psicológicas se definen como grandes teorías o concepciones dentro de la psicología. Han sido adoptadas por diferentes profesionales a lo largo de los años, a medida que examinaban el funcionamiento de la mente humana, la conducta y los procesos cognitivos.
En cuanto a la historia de las escuelas psicológicas, se considera a Wilhelm Wundt como el primero en proponer una corriente de pensamiento influyente en la psicología. El médico alemán es célebre por haber creado el primer laboratorio de psicología experimental, y muchos lo consideran como el padre de esa ciencia.
Después de Wundt, llegarían otros especialistas con sus propias teorías, métodos y perspectivas para enriquecer el debate sobre los diferentes aspectos de la psicología.
¿Cuáles son las escuelas psicológicas más importantes?
La mente de las personas es un terreno que se puede abordar desde diversos enfoques, incluyendo la conciencia, las emociones, el comportamiento, la cognición, entre otros. Por ese motivo, se han desarrollado decenas de escuelas psicológicas en todo el mundo.
No obstante, existe un grupo de escuelas psicológicas que son consideradas como las más influyentes, siendo sus fundadores grandes figuras en el mundo de la psicología. Son las siguientes:
- Estructuralismo
- Funcionalismo
- Psicoanálisis
- Conductismo
- Humanismo
- Cognitivismo
Veamos en qué consiste cada una y qué ideas defienden.
Estructuralismo
El estructuralismo es una de las primeras escuelas psicológicas de las que se tiene registro. Nace a raíz de los trabajos de Wilhelm Wundt, de quien hablamos al comienzo, pero se consolidó gracias a su discípulo, Edward Titchener.
Esta corriente sostiene que es posible analizar la mente a través de sus elementos o estructuras más básicas. Ello implica “reducir” los procesos mentales a través de la introspección, a fin de examinar las respuestas del individuo ante estímulos que incluyen sensaciones, imágenes y emociones.
Si bien el estructuralismo carece de una base científica rigurosa, la comunidad reconoce su influencia en el desarrollo de la psicología experimental.
Funcionalismo
El funcionalismo en psicología nace como respuesta al estructuralismo, y tiene como principal exponente a William James.
En lugar de centrarse en estudiar los procesos subyacentes que generan los estados mentales, esta escuela se centra en la función de esos estados en situaciones reales. En ese sentido, prioriza la observación sobre la introspección, para saber cómo una persona puede adaptarse a su entorno.
Psicoanálisis
Una de las corrientes psicológicas más influyentes, y cuyos principios prevalecen hasta nuestros días, es el psicoanálisis, un postulado desarrollado por Sigmund Freud, una de las principales figuras intelectuales del siglo pasado.
A modo de resumen, la escuela de Freud sostiene que la personalidad y comportamiento de las personas tienen una fuerte influencia de la mente inconsciente, y que la mente humana está dividida en tres elementos (el ello, el yo y el superyó).
El psicoanálisis ha sido empleado como base para el desarrollo de nuevas escuelas psicológicas, cuyas teorías versan sobre orientación dinámica y analítica, y tienen enfoques mucho más profundos.
Conductismo
Desarrollado a comienzos del siglo XX, el conductismo se fundamenta en todos los elementos y estímulos que rigen el comportamiento humano. Esta corriente postula que todo lo que hace un individuo responde más a estímulos externos que a procesos internos.
Representada por pensadores como John B. Watson, Ivan Pavlov o BF Skinner, el conductismo tenía su principal enfoque en el comportamiento observable, dejando a los procesos mentales en un segundo plano.
Humanismo
El humanismo surge como oposición al psicoanálisis y al conductismo, que eran predominantes en la década de los 50 y 60. La psicología humanista le resta importancia al estudio del comportamiento observable y enfatiza más en la experiencia subjetiva del individuo como herramienta para alcanzar todo su potencial.
Además de sus enfoques principales, el humanismo también incide en la importancia de la interacción humana y las relaciones interpersonales para el desarrollo del bienestar.
Esta escuela psicológica tiene como principales representantes a Abraham Maslow, Carl Rogers y Clark Moustakas.
Cognitivismo
Por último, el cognitivismo en psicología se enfoca en los procesos mentales que tienen lugar al momento de procesar la información. Entre sus elementos de estudio destacan la percepción, memoria, aprendizaje, razonamiento lógico, entre otros.
Aunque el cognitivismo no tiene un rostro representativo, ha tenido diversos exponentes, entre los que destacan Alan Baddeley, Frederic Bartlett, Donald Broadbent, entre otros.
¿Qué es la psicología positiva y cómo se relaciona con las escuelas psicológicas?
Fuera de las corrientes de pensamiento, la psicología tiene múltiples ramificaciones. Una de las más estudiadas en la actualidad es la psicología positiva, que se vale de investigaciones científicas para lograr que las personas puedan hallar sus propias fortalezas y virtudes, a fin de potenciarlas.
Esta rama no busca competir ni reemplazar a las escuelas psicológicas tradicionales. En vez de ello, surge como complemento a las teorías tradicionales, integrando diferentes perspectivas durante su desarrollo. Esa es una de las razones por las que muchos interesados en este campo deciden estudiar psicología positiva.
