Más de 7.000 docentes ya están registrados en el II Congreso Virtual Internacional de Educadores, organizado por UNIR. Su presidenta, Lea Sulmont, explica los ejes del evento y anticipa su visión sobre los cambios necesarios en el sistema educativo ajustados a los nuevos tiempos postpandemia y a la digitalización.
Como no podía ser de otra forma -ella es punta de lanza de la inclusión tecnológica en la educación desde hace más de 20 años- Lea Sulmont nos atiende por videollamada para explicar la esencia del II Congreso Virtual Internacional de Educadores, organizado por UNIR y que tendrá lugar del 22 al 24 de septiembre. Presidenta del evento y doctora en Ciencias de la Educación, habla con pasión de las temáticas que se abordarán en el Congreso bajo el título `La innovación para la mejora y la transformación de la Escuela’. Espera un gran foro de debate y reflexión, con expertos internacionales y la participación de más de 7.000 docentes de Perú y Latinoamérica ya registrados, para “repensar hacia dónde queremos desarrollar la innovación requerida en el sistema educativo”.
Congreso para innovar
¿Qué se busca en esta segunda edición del Congreso Virtual Internacional de Educadores?
Innovar para la transformación y mejora del sistema educativo. Muchas instituciones escolares arrastran los impactos de la pandemia que han generado situaciones relacionadas con efectos socioemocionales y falta de metodología para incorporar adecuadamente las tecnologías en el aprendizaje. Como el sistema actual es inoperante para poder responder a estas realidades, es necesario acelerar un cambio en la educación para una nueva época.
¿Por dónde se empieza a propiciar ese cambio de época?
Debemos formar a las personas para transformar la educación y la sociedad. De nada sirve contar con toda la tecnología si no la vamos a integrar desde un nuevo paradigma. A partir de un enfoque más metodológico, hay que potenciar esas claves que induzcan a la transformación e innovación sostenible y nos permita crear nuevos modelos de escuela, nuevas experiencias y formas de organización.
¿Qué otras urgencias demandan esa transformación educativa?
Hay que encontrar un balance entre lo cognitivo, lo intelectual y el bienestar socioemocional de los estudiantes
Hay que encontrar un balance entre lo cognitivo, lo intelectual y el bienestar socioemocional de los estudiantes; y esto último visto como experiencia relevante para ser potenciada como base del desarrollo intelectual. Por otro lado, necesitamos integrar el factor digital dentro de un nuevo modelo pedagógico que impulse la transformación de la educación y supere su imposición sobre sistemas caducos.
Al respecto de lo que dice, ¿Cómo debe ser la metodología pedagógica digital?
Ágil y con prototipados. Es necesario reorganizar la secundaria y la primaria e incluir tecnologías en la gestión del proceso de aprendizaje ahora que son digitales, y hacerlo de manera distinta según qué objetivos: teniendo en cuenta cómo se busca en bancos de información, cómo promover que la escuela también empiece a investigar, cómo gestionar la parte académica administrativa.
¿Podría poner ejemplos prácticos de metodología digital?
Si se quiere trabajar por competencias, deja de trabajar con cursos y organiza de otra manera los horarios. Si se quiere ofrecer multi trayectoria y multi credenciales a los estudiantes desde el comienzo en la secundaria, ofrece cosas que vayan a darle al joven la oportunidad de explotar sus talentos. Y si la oferta de la escuela pública es deficiente, mientras la de la privada crece, evitemos guetos aislados y que gente que viva cerca esté en la misma escuela.
El programa del Congreso contará con la participación de expertos internacionales.
Gestión socioemocional
Tras la pandemia se ha generado la necesidad de acompañar el bienestar emocional de los escolares. ¿Cómo debe ser tal acompañamiento?
Debe haber una alianza entre los actores. El bienestar de los estudiantes depende del bienestar de las familias, y el bienestar de los docentes está relacionado con el bienestar de las instituciones educativas, y de que éstas promuevan una salud para ellos. No obstante, el bienestar socioemocional pasa por la evidencia científica de ser vital para el desarrollo de la identidad y de los aprendizajes, y esto no puede abordarse solo con buena voluntad, sino desde la especialización.
¿Y esa especialización en quién debe recaer?
El maestro no puede ser responsable absoluto de todos los niveles de enseñanza y además ser tutor. Hay que reconfigurar sus roles y dejar otras funciones en manos de especialistas, psicopedagogos que hagan coach y acompañamiento a las familias, a los estudiantes y también a los profesores, que puedan hacer una detección temprana de problemas de depresión, salud, adicciones o aprendizaje entre niños y adolescentes.
Usted es formadora de formadores, ¿Cuáles son las necesidades fundamentales que los educadores deben cumplir para ofrecer una formación de calidad?
El docente debe saber trabajar en equipo interdisciplinar y fortalecer sus competencias digitales
El docente debe saber trabajar en equipo interdisciplinar. Tiene una formación de base que le permite diseñar, conducir, evaluar, gestionar experiencias de aprendizaje, pero después tiene que complementar la parte de los diagnósticos de las realidades con el apoyo de especialistas. Adicionalmente, debe fortalecer sus competencias digitales, junto con sus competencias socioemocionales, y hacerlas confluir en un proceso armónico e integral.
¿Qué experiencias de innovación educativa generan impactos de mayor alcance y logran ser sostenibles?
Ocurre cuando la comunidad educativa se involucra al completo: docentes, colegio y familias. Y todo comienza con la información y la socialización del objetivo de una experiencia; por ejemplo, explicar cómo es la dinámica de las tutorías. Luego, es fundamental sentirse involucrado y tener un índice de participación activo; por ejemplo, las familias teniendo presente el programa en casa, o interactuando a través de grupos de whatsapp o telegram que les permita compartir experiencias de la educación de sus hijos.
Escuela pública
Referente a la escuela pública, ¿Cómo contempla los retos futuros y si podrá afrontarlos con las restricciones que tiene?
La escuela pública necesita la acción decidida del Estado para cerrar brechas que exigen equidad y distribuir el financiamiento. No tiene lógica que el Ministerio de Educación tenga un plan, pero el de Economía y Finanzas distribuya bajo un mismo estándar todos los presupuestos. Hay que fortalecer la escuela pública, porque si es de calidad, la escuela privada, además de ser una alternativa, también puede contribuir a esa calidad alentándola desde la innovación. Mientras haya disparidad, las brechas se amplían y el problema persistirá.
Conectando con lo anterior, ¿Cuáles son los dispositivos de educación virtual e innovación curricular prioritarios en la escuela pública?
Lo que tiene que entender la escuela pública es que las competencias orientadas al perfil se pueden trabajar con otro tipo de metodologías. Por ejemplo, con un método de proyectos se puede organizar el día a día de la escuela de otra manera, poner a trabajar a los docentes en equipos multidisciplinarios que van a tener formas de atender más personalizada. Si seguimos planteando cursos segmentados sujetos a horarios fijos, ni se puede hacer integración por competencias, ni hacer personalización, ni cumplir con un currículo.
Por lo que dice ¿está abogando por una escuela más práctica que teórica?
La escuela está llamada a pensar en que ya cambió la época, que tiene que diseñar su modelo pedagógico para facilitar el aprendizaje más autónomo, pero más cooperativo, centrado en competencias y en cosas útiles. Con la tecnología están a la mano todos los contenidos. El problema es hacer una buena selección de ellos como insumos de calidad para poder generar trayectorias de aprendizaje distintas, personalizadas. Y deben ser los docentes, como diseñadores de aprendizaje, quienes depuren esos contenidos al servicio del estudiante.
En la “escuela del cambio”, los estudiantes participan de forma más activa y colaborativa.
Tecnología en el aula
A su modo de ver, ¿Cuáles son las pautas fundamentales de cómo aprovechar las tecnologías para los aprendizajes?
La tecnología debe disponerse acorde con la madurez del estudiante, ya que se va a integrar en diversos procesos de gestión, y la primera capa es el aprendizaje. Con la capa de la gestión del conocimiento, los niños de primaria van desarrollando habilidades digitales desde el principio, con actividades asequibles a través de los softwares existentes. Van avanzando con ellos, probando, equivocándose y volviendo a probar y resolver, para que de manera autónoma aprendan a su ritmo y a su nivel. Ya en la secundaria, los estudiantes son invitados a realizar iniciativas colaborativas: filmar algo con la Tablet, crear, comunicar… Se trata de un paso superior con habilidades socioemocionales y competencias digitales sólidas.
¿Está hablando de la tecnología como una apuesta por la flexibilidad educativa y de dar mayor iniciativa al estudiante?
Las tecnologías deben ser integradas de forma pertinente a los propósitos de aprendizaje
Las tecnologías deben ser integradas de forma pertinente a los propósitos de aprendizaje. Por eso es básico cambiar la configuración de los espacios, de los tiempos de aprendizaje y el proyecto. Hay que permitir en el adolescente que pueda direccionar sus autoaprendizajes en función de sus intereses y ritmo, y propiciar en el tiempo presencial el trabajo cooperativo.
UNIR es un buen ejemplo: su metodología online permite estudiar a la hora que se quiere, y el alumno puede encajar a medida los momentos de interacción con su rutina.
Ahora que se retorna a la presencialidad, ¿Cómo está afectando los cambios de la virtualidad?
Las clases en Latinoamérica han estado un promedio de 36 semanas cerradas durante la pandemia, en Perú 79 semanas. El retorno ha sido gradual, con mucho protocolo. Los más pequeños deseaban volver. Más contraste se da en los adolescentes, sentados en sus carpetas, distanciados, con mascarillas… sin sus computadoras. Preguntándose para qué han regresado a lo mismo. El modelo pedagógico tiene que cambiar e incorporar todos esos aprendizajes de habilidades digitales que han aprendido los jóvenes para hacer otra cosa.
Efectos del Congreso
¿Cómo prevé el impacto del Congreso para el Perú y Latinoamérica?
Estamos organizando un Congreso desde una universidad como UNIR en el que se van a exponer evidencia científica y experiencias. No es simplemente difusión, es construir conocimiento en contexto y colaborar en la transformación de la sociedad. Este es el rol de la universidad. El propósito final es darles a los colegios insumos prácticos, referencias, metodologías que puedan ser utilizadas en su planificación anual.
¿Por qué deben animarse los maestros a participar en este Congreso?
Necesitamos dejar de estar en piloto automático. Es necesario una pausa para reflexionar sobre todo lo que hemos hecho y mejorar nuestra práctica. El Congreso es una gran oportunidad para ello, y para juntarse y tener aliados que sirvan de ayuda para llevar a cabo la transformación del sistema educativo, a través de experiencias y evidencias.