Descubre cómo los distintos estilos de comunicación impactan el éxito y la armonía en el entorno laboral.
¿Sabías que la mayoría de problemas que experimenta una empresa derivan de una mala comunicación? El hecho de no intercambiar ideas de forma adecuada o tener un flujo de mensajes deficiente podrían tener consecuencias graves. De allí surge la necesidad de conocer los tipos de estilos de comunicación más importantes que existen en un entorno laboral.
Para desarrollar estrategias de comunicación a nivel avanzado y aplicables a todo tipo de organización, la Maestría en Comunicación Corporativa de la Universidad UNIR es la vía de formación más adecuada. Esta titulación, que deriva de la rama de Comunicación Social, te dará las herramientas para construir culturas corporativas sólidas y resolver situaciones de crisis, aportando valor diferencial.
Antes de centrarnos en cómo mejorar la comunicación laboral en cualquier organización, es necesario saber cuáles son los estilos de comunicación empresarial y sus características. Conócelos a continuación.
¿Qué son los estilos de comunicación?
Cuando hablamos de los tipos de estilos de comunicación, nos referimos a las múltiples formas que existen para expresar un pensamiento a una o varias personas. Estos estilos no solo se manifiestan de forma hablada, sino también por escrito o empleando el lenguaje no verbal.
El método que utilizamos para expresar un punto de vista, una idea, una valoración o un sentimiento depende de varios factores, incluyendo el ambiente que nos rodea y nuestra propia personalidad. En base a ello, podemos identificar cuatro tipos de comunicación laboral.
Principales tipos de estilos de comunicación
Como mencionamos, son cuatro los estilos de comunicación en el trabajo, cada cual con sus propias características.
Comunicación asertiva
La asertividad es una cualidad que nos ayuda a expresarnos de forma positiva y sin desmerecer a los demás, así tengan opiniones distintas. En ese sentido, la comunicación asertiva en el trabajo es un estilo honesto y respetuoso, que se ve complementado con una postura corporal firme, rostro relajado y contacto visual permanente, sin llegar a ser desafiante.
Comunicación pasiva
La comunicación pasiva en el trabajo se caracteriza por la ausencia de emoción y energía al momento de compartir una idea. Es frecuente en aquellos que sienten que su opinión no influye en las decisiones de la empresa o quieren evitar el enfrentamiento. Los comunicadores pasivos suelen evitar el contacto visual, son introvertidos y con habilidades sociales limitadas.
Comunicación agresiva
Es un estilo completamente opuesto al anterior. Al hablar de comunicación agresiva en el trabajo, hablamos de interacciones intensas que pueden llegar a generar conflictos sociales o laborales. Las personas que manejan este estilo tienen carácter fuerte y por momentos hostil. Además, necesitan ser el centro de atención y subestiman la opinión de los demás.
Comunicación pasivo-agresiva
Aunque pudiera parecer contradictorio (hasta cierto punto lo es), este estilo tiene rasgos tanto pasivos como agresivos. En este caso, la comunicación es indirecta, y muchas veces el emisor mantiene ocultas sus verdaderas emociones, y su lenguaje corporal no coincide con las cosas que dice.
Importancia de los estilos de comunicación en el entorno laboral
Muchos de los problemas de comunicación en el trabajo ocurren no por lo que uno dice, sino por la forma en cómo lo hace. Y es que no todos los estilos de comunicación son compatibles entre sí, y ello puede dar lugar a malos entendidos.
La importancia de la comunicación en el trabajo se ve reflejada en estos aspectos.
Mejora de la colaboración y el trabajo en equipo
La falta de una comunicación adecuada genera un mayor riesgo de que se produzcan conflictos y tensiones entre compañeros de trabajo. Pero si, por el contrario, predomina la claridad al momento de dar instrucciones o coordinar un proyecto, todos se sentirán más comprometidos con sus labores y habrá un clima positivo.
Por otro lado, conocer los estilos de comunicación de cada compañero es útil para adaptar la forma en que transmitimos nuestros mensajes, lo que se traduce en un mejor trabajo en equipo y una mayor productividad.
Resolución de conflictos
Los estilos de comunicación influyen directamente en la resolución de conflictos y controversias. De hecho, una misma situación puede desencadenar diferentes respuestas. Ante ello, es responsabilidad de los gerentes y directivos dominar habilidades comunicativas en el trabajo que se adapten a diferentes personalidades.
Poner en práctica la comunicación asertiva para gestionar conflictos implica expresarse con firmeza, pero de forma respetuosa, con un enfoque en las soluciones y no en las diferencias. Aplicar la escucha activa es otra de las claves para lograr acuerdos satisfactorios.
Desarrollo de habilidades de liderazgo
Se dice que un líder que no comunica no es realmente un líder (liderazgo autocrático). Pero no solamente ello, sino que también es capaz de adaptar su estilo de comunicación a cada situación, procurando emplear el canal más adecuado. A diferencia de un jefe que se limita a dar órdenes, un líder motiva a su equipo e inspira confianza.
Estrategias para mejorar la comunicación en el trabajo
Entonces, ¿cómo lograr una comunicación efectiva en el trabajo? Compartimos algunas estrategias que te serán de utilidad.
Identificación de tu estilo de comunicación
Para poder mejorar tus habilidades de comunicación, el primer paso es identificar qué estilo se asemeja más a tu personalidad. Por ejemplo, si sueles reaccionar con inmediatez a lo que alguien dice, puedes establecer como objetivo responder de forma más reflexiva, sin imponer tus ideas. Te será de ayuda solicitar un feedback a tus compañeros para reconocer tu estilo.
Capacitación y desarrollo
Considerando que las empresas tienen múltiples herramientas para facilitar la comunicación entre empleados, es necesario que todos reciban una capacitación para saber qué canal o método es el indicado para cada caso. Plataformas de e-mail o medios sociales son útiles para transmitir novedades, mientras que las reuniones en persona son valiosas para tratar asuntos relevantes.
Prácticas para fomentar una comunicación efectiva
Para que tus mensajes sean entendidos y bien asimilados por tus compañeros de trabajo o subordinados, te aconsejamos tomar en cuenta estas sugerencias:
- Sé claro y directo, en especial si estás confrontando ideas. Evita ironizar o hacer comentarios que no guarden relación con lo que quieres comunicar.
- Adopta una postura serena, sin caer en el desinterés, y emplea un volumen de voz adecuado al lugar y contexto en que te encuentres.
- Sé empático con tus interlocutores. No solo harás que tu mensaje se entienda a la perfección, sino que también podrás anticipar la reacción de tus receptores.
- Acompaña tu mensaje con una comunicación no verbal que refuerce tu posición. Tu cuerpo debe expresar lo mismo que dices con palabras.
- Respeta a tus interlocutores en todo momento. Además de darles un trato cordial, presta atención a lo que comenta (escucha activa) y evita distraerte con otros asuntos.
Conocer los tipos de estilos de comunicación es fundamental para crear un ambiente de trabajo positivo, en el que todos los miembros del equipo se sientan cómodos expresando sus ideas. Recuerda que fomentar un clima de diálogo saludable es esencial para el éxito de cualquier organización.