Descubre qué es el mindfulness, cómo se practica, sus beneficios para la salud mental y física. ¡Infórmate!

Mindfulness es un término en inglés que se puede traducir como “conciencia plena” o “atención plena”. Sin embargo, su significado real es mucho más profundo, ya que se trata de una filosofía de vida que tiene a la meditación como punto de partida, que destaca en especial por su enfoque científico en lugar de religioso.
En el ámbito educativo, la aplicación del mindfulness en el aula por parte de los docentes puede traer múltiples beneficios, como una mejor relación entre los alumnos, mayor concentración y autocontrol, así como un rendimiento académico más destacado.
Para aplicar con éxito todas las técnicas relacionadas con el mindfulness y otras terapias de 3.ª generación, es necesario obtener una formación avanzada. En ese sentido, estudiar una Maestría en Psicoterapia en UNIR o una Carrera de Psicología es una excelente alternativa, pues te permitirá aprender metodologías prácticas modernas, practicar con casos clínicos simulados y acceder a grandes oportunidades profesionales.
¿Qué es el mindfulness?
El mindfulness es una práctica que implica ser plenamente conscientes de lo que ocurre en el momento presente, tanto a nivel interior (pensamientos, sentimientos, sensaciones) como en nuestro entorno, sin emitir juicios. El mindfulness y la meditación guardan una relación estrecha, pues ayudan a reducir el estrés y aumentar el bienestar.
Entre los mayores precursores de esta técnica figura Jon Kabat-Zinn, profesor emérito de medicina y creador del programa de Reducción de Estrés basado en Mindfulness (MBSR).
En su guía “Mindfulness para principiantes” (2012), Kabat-Zinn sostiene que el mindfulness es la respuesta a un llamado interno, que puede ayudar a las personas a recuperar su vida, ya sea a través de la práctica de meditaciones guiadas o dejando que se impregne de forma natural y cotidiana.
“Técnicamente hablando, el mindfulness es lo que emerge cuando prestas una atención deliberada y no crítica al momento presente como si tu vida dependiera de ello. Y lo que emerge no es más que la conciencia (…) El entrenamiento en mindfulness consiste, en realidad, en el ejercicio de un recurso que ya poseemos”. (1)
Fuente: Mindfulness para principiantes.
Las raíces del mindfulness están en el budismo. Sin embargo, hoy se aplica en la medicina convencional sin tener necesariamente un vínculo con creencias religiosas.
¿Cómo se practica el mindfulness?
El mindfulness, más allá de ser una terapia complementaria, es una actitud ante la vida. Es por ello que se puede poner en práctica de distintas formas o siguiendo varios tipos de entrenamiento.
Si dejamos de lado su definición teórica y lo llevamos a la práctica a través de la meditación, encontramos que el primer paso de este proceso psicológico consiste en enfocar la atención en un objeto determinado, que suele ser en la mayoría de los casos nuestra propia respiración. El siguiente paso es observar nuestras propias sensaciones en el momento, presente, es decir, en el “aquí y ahora”.
La organización Mindful recomienda reservar un tiempo y espacio tranquilo para poner en práctica la atención plena. Propone sentarse en una posición relajada, concentrarse en la respiración y otros puntos de anclaje sensoriales, y dejar ir suavemente cualquier juicio o distracción. Señala además que, cuando la mente divague, es necesario traerla de regreso amablemente hacia su punto focal. (2)
Beneficios del mindfulness
Las terapias mindfulness no solo ayudan a combatir el estrés, sino que mejoran nuestra salud a nivel mental y físico. Veamos algunos de sus principales beneficios.
- Lograr una conciencia plena hace más fácil que las personas disfruten de los placeres de la vida a medida que se presentan.
- Genera una mayor capacidad para hacer frente a las adversidades y encontrar soluciones.
- Las personas que practican meditación y mindfulness son menos propensas a caer en preocupaciones sobre el futuro o lamentarse por el pasado.
- Según investigaciones, la atención plena puede contribuir a tratar condiciones cardíacas, disminuir la presión arterial y el dolor crónico y aliviar problemas gastrointestinales.
- Existen casos de éxito en la aplicación del mindfulness para dormir de forma más adecuada.
- Afecta de forma positiva la capacidad de concentración, suprimiendo las fuentes de distracción.
- Estudios han demostrado su eficacia en algunos casos de depresión, previniendo posibles recaídas.
- Contribuye al desarrollo de hábitos más saludables en aspectos como la alimentación, la actividad física y la comunicación dentro del hogar.
Ejercicios de mindfulness en el aula
La práctica del mindfulness no está dirigida únicamente a adultos. De hecho, los docentes en las escuelas pueden emplear varias de sus técnicas para ayudar a sus alumnos a mejorar su capacidad de concentración, calmar sus emociones y prevenir episodios de crisis o conflictos. La atención plena también puede ayudar a niños con necesidades especiales a desarrollar mejor sus habilidades.
Entre las actividades de mindfulness que se pueden implementar con éxito en el aula, figuran las siguientes:
- Ejercicios de ritmo cardíaco, control de respiración y relajación muscular.
- Ejercicios en los que se utilizan los sentidos mientras se practica la atención plena.
- Caminatas al aire libre para promover la observación.
- Inclusión de refrigerios para que los estudiantes sean más conscientes de lo que ingieren.
- Tiempos de tranquilidad en el cronograma de clases para combatir el estrés.
- Uso de guiones breves de meditación para aprender a procesar la ira.
- Escritura de un diario en el que los alumnos reflexionen sobre sus experiencias.
- Uso de apps con ejercicios interactivos de relajación y meditación.
- Incorporación de tarjetas mindfulness con imágenes o palabras que invitan a la reflexión.
Actitudes del mindfulness
De acuerdo a Jon Kabat-Zinn, existen 7 actitudes que funcionan como soporte para la práctica del mindfulness. Todas ellas son interdependientes, es decir, influyen unas sobre otras, formando un equilibro saludable.
Las actitudes son:
- No juzgar: Consiste en asumir una postura imparcial que nos permita ver mejor la realidad que nos rodea.
- Paciencia: Se trata de aceptarse a uno mismo, entendiendo que las cosas ocurren en su debido momento.
- Mente de principiante: Es contemplar nuestro entorno como si fuera la primera vez, sin depender de nuestra propia experiencia.
- Confianza: Implicar creer en nuestro propio ser, escucharse a sí mismo y no depender de los demás.
- No resistencia: En lugar de meditar “para” cambiar algo, conviene hacerlo “porque” ocurre algo.
- Aceptación: Se trata de ver y aceptar las cosas tal como son en el presente, a fin de tomar mejores decisiones.
- Ceder: Es eliminar el apego a ideas, cosas, sensaciones o resultados a los que la mente tiende a aferrarse.
Si bien muchas personas suelen cuestionarse si están llevando a cabo la meditación de forma correcta, el principal requisito es ser consciente, y no preocuparse más de la cuenta por las distracciones. La práctica de mindfulness se puede desarrollar y perfeccionar a lo largo del tiempo, ya sea mediante procesos formales o con actividades del día a día.
Bibliografía APA
(1) Kabat-Zinn, J. (2012) Mindfulness for beginners, Reclaiming the Present Moment and Your Life. Editorial Kairós, S.A. https://iuymca.edu.ar/wp-content/uploads/2020/10/Mindfulness-para-Principiantes.pdf
(2) Staff Mindful (2025, 27 de mayo) Getting Started with Mindfulness. Mindful https://www.mindful.org/meditation/mindfulness-getting-started/








